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El examen de padres


En el viaje llamamos a todo el mundo que os está esperando con cariño: a vuestros tíos Pedro y Elena y Carlos y Ana, y a vuestras madrinas Elena y Reme y a Sonia que nos ayuda mucho en la tienda desde que papá empezó a luchar para ponerse bien y pusimos muchísimos mensajes a muchos amigos que en diversas partes de España estaban muy pendientes de tener noticias, enseguida recibimos contestación de todos con mensajes llenos de cariño y alegría.
Cuando llegamos a Almería fuimos corriendo a hablar a Asuntos Sociales, que es la oficina donde dan los permisos para buscar a los niños que están al otro lado del hilo rojo de cada papá y mamá y les explicamos que aunque teníamos permiso para adoptar sólo a un niño o una niña vosotros erais dos hermanitos y nos dijeron que tendríamos que presentarnos a un examen para ver si teníamos notas suficientes para poder traeros a los dos.


Llamamos a quienes nos tenían que hacer el examen y enseguida comprendieron que no podían haceros esperar y nos citaron para dos días después (el día 2 de Julio) en una oficina donde nos estuvieron haciendo preguntas durante casi tres horas, y luego nos llevaron a cada uno a un cuarto para que hiciéramos un examen escrito con muchas preguntas muy dificiles, y después nos leyeron las respuestas en las que papá y yo habíamos contestado casi igual y nos pareció que les habían gustado nuestras respuestas, pero nos dijeron que tendrían que estudiar toda las prueba, la oral y la escrita con otras personas que serían entre todos los encargados de averiguar si estábamos capacitados para acoger, cuidar y educar a dos hermanitos de cortas edades.
El día ocho de julio nos citaron para darnos “la nota” del examen y nos dijeron que habíamos superado muy bien la prueba y que al día siguiente llevarían ese examen a Asuntos Sociales de Almería para que pasara otra comisión, y luego si pasaba comisión lo mandarían a Asuntos Sociales de Sevilla, que es como el centro base de operaciones donde emitirían el certificado correspondiente que nos acreditara ante el mundo como “padres capaces”.


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